lunes, 23 de agosto de 2010

VIERNES EN IMAGENES


UN COMPILADO DE LOS FESTEJOS DE CUMPLEAÑOS DÍA VIERNES

UNA FIESTA, TODAS LAS VOCES




Hicimos un festejo de cumpleaños para Quequén, lo logramos. NO estuvimos solos, fuimos muchos. De forma directa y también de forma indirecta. Sumamos personas, entidades, voces, ideas, sueños.
Pudimos poner un objetivo en común entre todos y trabajar en pos de eso, dejando de lado las diferencias.
La ciudadanía quequenense lo logró. Vecinos comunes y corrientes construimos un espacio de encuentro, de reflexión, de conocimiento de otros, y obviamente de festejo y alegría. Los artistas participaron con el mismo espíritu, sin pedir nada a cambio por su actuación, de la misma manera que todos.

Es un orgullo que los quequenenses hallamos festejado nuestro cumpleaños, sin divisiones partidarias, sin fines de lucro, sin egos personales.

QUEQUÉN ESPERA

El repaso de las actividades es el siguiente:

La exposición pictórica en la biblioteca popular, la inauguración del mural “Nuestra Identidad” en la rotonda de Av. Lobería y Circunvalación, las visitas en el Museo de la estación Hidrobiológica y las actividades celebradas en el CEF N°76 durante el viernes 6 y el sábado 7 de agosto se llevaron adelante en tiempo y forma.

En las actividades principales del CEF, las entidades que expusieron sus actividades en stands posibilitaron que la gente conozca que es lo que hacen algunos quequenenses, que se interesen y hasta que algunos se hayan mostrado interesados en participar de distintas actividades.

En los stands se encontraban las siguientes entidades: ESB N°11, Jardín de infantes N°913, Prefectura Naval Argentina, Exposición de Faros del Sr. Chávez, Archivo Histórico Biográfico Quequenense, Arte y Diseño Quequén, Universidad Nacional del Centro sede Quequén, CONICET, Asociación Alfredo Marcenac, Escuela Municipal de Arte de Quequén, Asociación Motos Clásicas Necochea Quequén, Agrupación Vito Dumas, Estación Hidrobiológica del puerto de Quequén, “Mi museo” de Miguel Sánchez, Centro de Jubilados de Quequén, Asociación Corredores Master de Necochea – Quequén y Artesanos de la Bahía.
Los espectáculos y charlas fueron bien recibidos por el público, quien llego en buen numero durante las dos jornadas, contabilizando unas 3000 personas en total entre viernes y sábado.
El cierre a cargo del Chango Spasiuk fue una gran sorpresa para muchos, porque no solo brindo su música sino que también, se pronunció a favor de la construcción de espacios como el que logramos construir entre varias entidades para este festejo y afirmó que no podría ser posible la autonomía de nuestra ciudad sin la existencia de estos espacios y esta construcción ciudadana.
Además, el compartir de la torta tuvo un propósito benéfico, ya que hubo una alcancía para donaciones para el hospital Irurzun, y con lo que se junto $ 511,90, donaremos un Hook para cirugía laparoscópica de vesícula
Tenemos que agradecer a mucha gente entre ellos al Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires y a su director Juan Carlos D´Amico, al Consorcio de Gestión de Puerto Quequén en la persona de su presidente Ernesto Costanzo por las gestiones ante provincia para la llegada del Chango Spasiuk, y por la ayuda y el apoyo en el proyecto. Al Delegado Municipal, Bernardo Amilcar, quien se sumó generosamente a dar una mano en lo que se necesitaba. Al CEF N° 76 por permitirnos usar las instalaciones y por sumarse al proyecto. A Ottonello por la cesión sin cargo de las turbinas de calefacción que permitieron mantener un buen clima en el CEF. A Marta Serrano de Combustibles Quequen S.A. por su generosa donación.Al ENTUR por el apoyo en la parte de sonido y luces. A la UATRE por el préstamo de 500 sillas. A la Cooperativa Agropecuaria Gral. Necochea por su donación. A la Sra. Anita Araya por la ambientación del salón de exposición con telas y luces. A los músicos de la Escuela Municipal de Artes de Quequén, a la peña folclórica de Guillermo Escruela, al grupo de tango 2X4, a La Reja, a los grupos coreográficos del CEF, al grupo de reggaeton de Rocio Llanos, a los Promeseros del Chamame, a La Peñaloza y al Chango Spasiuk y sus músicos.

Entidades participantes

Archivo Histórico Biográfico Quequenense
Juventud Por Quequén
Centro de Jubilados de Quequén
Escuela de Artes de Quequén
La Subida
CEF nº 76
Biblioteca Popular de Quequén
Grupo Construir Proyectar Identidad
Consorcio de Gestión de Puerto Quequén
Delegación municipal de Quequén
Prefectura Naval Argentina
Faro Quequén - A.R.A.
Universidad Nacional del Centro, sede Quequén
Estación Hidrobiológica del puerto de Quequén
Escuela Secundaria N° 11
Grupo de arte y diseño Quequén
Asociación Motos Clásicas Necochea Quequén
Centro de formación profesional N° 401
CONICET
Agrupación Náutica Vitto Dumas
Asociación Corredores Master de Necochea – Quequén
Artesanos de la bahía
Jardín de infantes N°913
Asociación Civil Alfredo Marcenac
ANQAM

Pasó el evento, quedan las reflexiones




Pasó el evento queda la emoción, la alegría; en fin, queda la felicidad de lo sucedido. A la par de la finalización, nace la reflexión, la introspección, el análisis y la autocrítica. Sabia compañera si es bien usada, la reflexión permite sacar el jugo a las situaciones vividas. Y en el análisis, me encuentro reflexionando sobre la cobertura mediática del evento (siendo yo parte del rubro periodístico, es una costumbre en mi) y veo deficiencias.

Encuentro poco y nada, o mejor dicho, nada. ¿Por qué nada? Porque la simple repetición de una gacetilla de prensa como difusión informa en sí, pero no construye, no transmite ni edifica.

El evento por los festejos del cumpleaños de Quequén, no fue simplemente una concreción de actividades, espectáculos y atractivos varios. Decir eso es justamente ser simplista, es informar pero no comunicar. Es dar la noticia sin construir. Y encima de todo, no cubrir el evento (que fue el más multitudinario del fin de semana, sin contar el día del niño que organizó el PJ, que cuenta con los recursos para lograrlo y que sí tuvo difusión) es ignorar lo que sucede en el pago propio.

En la realidad que vivimos los argentinos, ya no solo hablando de Quequén, encontrar una construcción ciudadana de un evento sin fines de lucro, en el que participaron distintos actores sociales sin imposiciones partidaria ni estatales, pero si con la interacción con entidades privadas, públicas y estatales, es digno de ser destacado.

Ignorar este fenómeno particular que se dio en esta ocasión a la hora de informar, no construye, no trasmite al resto de la gente la idea que es posible que personas comunes y corrientes se junten y logren hechos extraordinarios; en fin, no edifica.

Los periodistas tenemos herramientas para construir y ser parte de la sociedad. Y son justamente las noticias y la construcción que de ellas hacemos el instrumento con el que contribuimos con nuestro granito de arena al hecho de poder tener un barrio, un pueblo, una ciudad, una sociedad mejor.

En este caso compañeros colegas, lamentablemente, hemos fallado.

Oscar Scioscia, periodista y locutor nacional

miércoles, 7 de julio de 2010

Un encuentro por la vuelta del Tren a Quequén

Muchos habitantes perdieron la nociópn dle tiempo y ya ni recuerdan cuando pasó por la estación del Quequén el último tren. Una ciudad bonarense, sobre el Atlántico, copn amplias playas y que solo la divide el río homónimo de Necochea, ciudad cabecera del Partido.

"Este domingo a las 14,20 en la puerta de la Estación Quequén del distrito de Necochea sin conocernos, sin carteles ni pancartas, sin oradores ni programa de actividades nos comenzamos a reunir, algunos trayendo pintura para el mural que realizarán artistas de Quequén en la entrada de la ciudad. Entre mates, torta y fotos ¡muchas fotos! enseguida la conversación fue sobre un solo tema: la VUELTA DEL TREN A QUEQUÉN!! Una hermosa carpeta cuyas tapas fueron realizadas por las artistas quequenenses empieza a circular y todos quieren escribir sus recuerdos, sus anécdotas, su deseo de volver a escuchar y ver el tren de pasajeros llegando a Quequén..." -le contaron a Turismo 530, los amigos del Mehari Club Necochea.

Aquí algunas palabras:

"No sé en qué momento dejó de pasar pero sé que tiene que volver". Cris
"Apoyando como siempre los sueños!!". Marta
"En el 2004 prometieron arreglar las vías para ganar las elecciones, ganaron... Viva Quequén!". Arturo
"He viajado durante muchos años de mi vida en tren. No hay nada más hermoso". Rocío
"Espero que el tren vuelva a Quequén, si puede andar el de carga por qué no puede andar el de pasajeros?". Juan
"Qué lindos recuerdos nos trae la estación, recuerdos que sería bueno que volvieran a ser realidad". Dora
"Soy Erica y llegué por primera vez a Quequén en el verano de 2001 con mi esposo Samuel vinimos en tren a Quequén que no conocíamos... y bueno gracias a este viaje en el tren nos enamoramos de Quequén y hoy en día tenemos nuestra casa aquí...""Por la cristalización de un sueño quequenense LA VUELTA DEL TREN"- una vecina de acá.
"Ojalá pueda volver de nuevo el tren a mi pueblo. MI papá ferroviario lo vería con orgullo. He viajado mucho con él de niño...". Armando, Jesica y Florencia.
"Ojalá que vuelva, el pueblo de Quequén lo necesita, es parte de su historia". Anabel
"Por la vuelta del tren que nunca debió partir". Martín.
"Por la vuelta del tren, por la vuelta de un país para todos". Alejandro.
"Como quequenense deseo que vuelva el tren es la despedida y el arribo más romántico". Yamila
"Te esperamos! ¿Cuándo llegás?". Edgardo

Siguen los recuerdos... esta carpeta seguirá circulando durante los festejos del aniversario de Quequén para que la gente escriba, recuerde y pida la vuelta del tren a Quequén.

Se escucharon muchos relatos: cuando se vendían los boletos en la rambla de Necochea, o cuándo la gente bajaba bicicletas, triciclos y todo un cargamento para veranear aquí, o cuando se empezó a rumorear que el tren dejaría de pasar y se hicieron promesas no cumplidas, o cuando el tren dejó de pasar y todo cambió por acá, muchos recuerdos!! Mucha emoción!!

"Caminábamos entre la estación y el taller de Arte y Diseño a una cuadra de allí donde Natalia y Silvia Maidana, Sandra Méndez, Elba Velazco y Flavia García Vega exponían sus obras como un regalo de bienvenida a ese primer tren que pronto queremos ver llegar repletos de pasajeros!!".

Otros recorrían el lugar, caminaban por las vías, miraban lo que aún queda en pie y lo que se fue destruyendo, los más aventureros se fueron hasta el sitio donde se daba vuelta la locomotora mirando todas las señales, torres y palancas que hay en ese trayecto.

Mucha emoción escuchando la lucha de muchos que gritaron fuerte cuando el tren dejó de pasar pero sus gritos se ahogaron en vaya saber qué lugar... un cosquilleo por el cuerpo mirando la gente hoy ocupando los bancos, llenado el andén, los chicos jugando alrededor de la estación que muda pero despierta también pide que se vuelvan a abrir sus puertas para vender los boletos y ¡¡a viajar en tren!!!!!

No fue una tarde como todas: en Quequén se juntaron a tomar mate y pedir por la vuelta del tren!!!!

Fuente: www.turismo530.com
05/07/2010

martes, 18 de mayo de 2010

BICENTENARIO + 20 AÑOS



25 de mayo de 2010… La Escuela Municipal de Artes de Quequén cumple 20 años! No realizaremos “un acto”, sino que estaremos festejando durante todo el año, a través de muestras actividades, audiciones, talleres, muestras y performances en nuestra escuela y en diferentes espacios, gratuitos y abiertos a la comunidad, acercando el arte a todos.

El próximo 25, estaremos en la plaza Dardo Rocha de Necochea, celebrando el Bicentenario + 20 años,

de 14 a 17.30 hs.

Participaremos con:

“Espacio de plástica infantil”, a cargo de las docentes Karina Aguilera, Nelida Nuñez y Andrea Mansilla

“Espacio de danza”, Hector Lescano, V. Choperena y A. Moreyra

“ Huella, gato y escondido” a cargo de Juan Santilli y Jose M.Aguirre.

También habrá pasteles y escarapelas.

29 de mayo, Expresión corporal-improvisación a través de la música, para todas las edades con y sin discapacidad, 19 hs. En el CEF No76 de Quequén. Gratuito.-

Los esperamos. Gracias por difundir.-

Escuela Municipal de Artes de Quequén, 519-2686, tel 450046 o 15485767.-

Veronica Choperena.-

lunes, 3 de mayo de 2010

Nuestra intención de festejo de cumpleaños

El grupo que está trabajando en el proyecto del Archivo Histórico Biográfico Quequenense, conformado entre otros por integrantes de Juventud por Quequén, Centro de Jubilados y Pensionados de Quequén, La Subida, y otros quequenenses que decidieron sumarse a trabajar, esta abocado en la organización de un gran festejo en ocasión del cumpleaños 156 de nuestra ciudad.

Es por eso que ya tuvimos contacto con el Delegado Municipal, Bernardo Amilcar, quien nos apoyó en nuestra idea y se sumó al proyecto; así como también con la comisión directiva del CEF Nº 76 de Quequén quienes se han unido al plan para la organización del festejo. Al mismo tiempo hemos mantenido una reunión con el Presidente del Consorcio de gestión de Puerto Quequén, Ernesto Costanzo, quien se ofreció para realizar gestiones ante el Instituto Cultural de la Provincia, a fin de contar con un artista de renombre para el cierre de los festejos , como así también ofreció el apoyo del Consorcio para realizar una serie de actividades que están siendo analizadas. También se ha sumado y ha expresado su apoyo la Escuela Municipal de Artes de Quequén.
Estamos trabajando en la organización, junto con estas entidades y las que quieran participar, para concretar un festejo popular para este 3 de Agosto, que marque el punto de partida de una de las herramientas para profundizar la identidad de los quequenenses.

Nuestra idea es organizar un festejo popular, gratuito y multimediático. Con expresiones culturales y artísticas surgidas del seno de los quequenenses, muestras de los trabajos que viene realizando el Archivo Histórico Biográfico Digital Quequenense, y la suma de distintas expresiones propias de la ciudad (culinarias, artesanales, deportivas, etc.).

Esta es nuestra intención, la de festejar el cumpleaños de nuestra ciudad entre todos, compartiendo lo que hacemos y lo que somos como quequenenses.


Por consultas o contacto 15602323 o 15407113

viernes, 30 de abril de 2010

Archivo Histórico Biográfico Quequenense: El primero de varios sueños

Aristóteles afirmó que la esperanza es el sueño de los hombres despiertos. Entonces eso significa que nosotros estamos soñando despiertos. Soñamos que otro mundo es posible; que entre todos podemos cambiar nuestra realidad, la propia, la de cada uno, y por lo tanto la de todos aquellos que creen que pueden cambiarla.

Armar el Archivo es un sueño, un deseo, una esperanza. Es el sueño de hombres despiertos, que buscan cambiar su realidad, construirla, modificarla, alterarla. El sueño de ir por esta vida caminando a paso firme a veces, a gatas otras, apoyado en otro cuando no podemos avanzar, pero caminado al fin.

Seguiremos soñando despiertos entonces, avanzando en la búsqueda de mas sueños que nos guien mientras estamos despiertos y nos reconforten, justamente como todos los sueños, mientras dormimos.

Si sentís que este también es tu sueño, tu esperanza, soñemos juntos despiertos que otro mundo es posible.

A POR EL ARCHIVO HISTORICO BIOGRAFICO QUEQUENENSE (el primero de varios sueños)

jueves, 29 de abril de 2010

Cuando las dos orillas se unían en balsa

Ildefonso Altuna hijo, recuerda a su padre y la balsa que durante diez años arrendó y que hoy es recordada con su nombre.


Ildefonso Altuna (hijo) es un hombre franco y calido, como el abrazo de un amigo. Es hijo del hombre cuyo apellido se relaciona indefectiblemente con la balsa que durante años permitió cruzar el rió Quequen. Cuando se le pide que hable de su padre, piensa un momento y, diligente, responde, “tengo a mano el santificado de nacimiento de mi padre”. Se levanta y lo saca del estante de un mueble. Luego, abierto el dialogo, como un libro que vuelve sus hojas atrás, pausadamente comienza su relato.
“mis abuelos por parte de madre Escruela- Gonzáles (de este matrimonio en el año 1897, nació su hija Beatriz) llegaron para radicarse en la rinconada del Quequen, en el año 1860. Solo habitaban las riveras del río pequeños grupos de mansos aborígenes establecidos desde hacia mucho tiempo y que fueron con los primeros con los que empezaron a trabajar en trueques de mercaderías y productos”, comento.
Años mas tarde llego don Pedro Luro he inicio la construcción de dos muelles destinados a la carga y descarga de los pailebotes que comenzaron a llegar desde el puerto de Buenos Aires a este insipiente puerto fluvial, transportando rollos de alambre, postes, torniquetes, varillas, herramientas, materiales de construcción, etc. Para los campos y estancias de la zona, retornado a su puerto de origen con cueros, grasa de potro, plumas de avestruces, tasajo, lana, etc.
Estas barcazas transportaban 100 toneladas de mercadería y tardaban una semana en cubrir el trayecto Buenos Aires- Necochea lo que equivalía a la carga de una tropa de carretas que tardaban un mes o a veces mas, de acuerdo al estado del camino. Cuando los ríos y arroyos se desbordaban la duración del viaje no se podía calcular. Esto llego a que los comerciantes y estancieros, vieran de forma distinta a nuestra región, debido al achicamiento del tiempo logrado gracias a estos transportes.
“mis abuelos paternos fueron Mateo Altuna, casado con Maria Juana de Altuna. Su hijo Ildefonso, de 11 años de edad, viajo solo a Quequen en 1896, procedente de la Villa de Aztigarreta, provincia de Guispuzcua, San Sebastián, España”, explico Ildefonso hijo.
“fue Varela el primer propietario de la balsa”, indico Altuna. “a su fallecimiento la viuda se la alquilo a Cutura, que la trabajo hasta el año 1914, cuando una terrible inundación la hundió y arraso con la construcción de futuro puente que se levantaba a menos de cien metros del apostadero de la balsa y del que todavía quedan los restos de las bases”.
Como consecuencia de este desastre y, por seguridad, se decidió construirlo 500 metros río arriba, lugar donde se haya ubicado actualmente.
“al desistir Cutura del arrendamiento de la balsa, fue mi padre el que hablo con viuda de Varela y se la alquilo”, preciso el hijo del balsero. “y en el año 1915, con la ayuda de los hermanos Rossi, refloto y reparo la balsa, agregándole un portalon que se levantaba he impedía que los animales que debían cruzar el río viera el agua y se asustaran”.
“cuando arribaban a la orilla opuesta, bajaba el portalon, que también servia como plataforma para que los vehículos no rodaran por el barro”, explico.
“era este el medio mas rápido y seguro que existía en ese tiempo para cruzar de una orilla a otra y, como este servicio era requerido a cualquier hora, mi padre que tenia como ayudante a Norberto Gonzáles (hermano de la que mas adelante seria su esposa)”, agregó. “Se turnaban a los efectos que, los que querían cruzar no esperaran a los efectos que, los que querían cruzar no esperaran así fuera en plena noche”.
“Norberto vivía en la casa de mi padre, que estaba ubicada a la izquierda, sobre la loma. Una casa de dos pisos, que todavía se conserva en muy buenas condiciones”, preciso Ildefonso.

La familia Altuna

Ildefonso Altuna contrajo matrimonio con Beatriz Gonzáles, en la iglesia Nuestra Señora de la Merced que Quequen, el 29 de agosto de 1921. Fueron sus hijos: Irma, Marta, Paulina, Juan Américo e Ildefonso.
“ a través de esta balsa fueron transportados : comerciantes, gente de la zona, artistas, importantes políticos y estancieros.”, recordó Alfonso hijo. “de algunos de ellos conservo como recuerdo las anécdotas contadas por mi padre”.
Altuna renuncio al arrendamiento de la balsa en año 1925, “cuando una gran inundación producida por una elevadísima marea la arranco del lugar donde estaba anclada, la arrastro varios metros y la hundió nuevamente”, señalo. Este hecho desafortunado y la próxima terminación del puente Colgante, hicieron que mi padre desistiera de continuar arrendándola”.
“para reflotarla, fueron contratados los hermanos Rossi (famosos por su conocida herrería) y Juan Altuna, hermano de mi padre, los que realizaron la tarea. Una vez que lograron apoyarla en tierra firme, le fabricaron las ruedas con seis troncos de árboles y seis llantas de hierro caldeadas por los Rossi”, dijo Ildefonso. “sumado a tres ejes de chatas unidos entre si para que tiraran parejo, la prepararon para su traslado. Así lograron afines de año 1925 ponerla en movimiento”.

El adiós a la balsa

Se alejo costeando el río camino alas Cascadas, llevaba como guardia de honor, por los servicios prestados, tres tractores, conducidos por Benito Landa, Pedro Arrizurieta e Ignacio Orondo. Viajaron ocho días a paso de hombre, en lenta y penosa marcha. Era el adiós definitivo al servicio de balsa de la bajada de Gil.
Erguida, desde el alto de la loma “La Fundadora” almacén de ramos generales de los hermanos Gil, contempla a su compañera de décadas alejarse. Ella, orgullosa se preparaba para un periodo de progreso acelerado, dispuesta a escribir una nueva pagina del libro de la historia del pueblo “Cuidad de Quequen”. De esa misma historia que la balsa de Ildefonso Altuna terminaba de escribir.
Pese a que río arriba, más allá de la Cascada, continuo prestando servicio de cruce, la balsa que perteneció a Ildefonso Altuna prontamente desapareció sin pena ni gloria, olvidada, absorbida por el progreso. Dicen los nostálgicos que mirando atentamente al fondo del río, todavía pueden distinguirse partes de la balsa que hace años dejo de servir.
Ildefonso Altuna, fogonero en la lucha por el progreso de Quequen, llego a estas tierras siendo un jovencito, cuando los habitantes que soñaban con la fundación del pueblo podían contarse con los dedos de las manos. Su actuación fue activa en el desarrollo de esta sociedad, fue fundador de la “Unión Vecinal de Fomento”.
“el balsero” en una época que cruzar el río era una odisea y cuando el progreso desprecio la balsa, construyo frente a la plaza principal el Hotel Euskalduna, con siete piezas, restaurant, salón comedor, despacho de bebidas, cancha abierta de pelota baska (trinquete), cancha de bochas y salón de fiestas donde actuaban los artistas que llegaban desde Buenos Aires a representar sus obras de teatro.
Esto es historia pasada y toda historia merece ser escrita para que no caiga en el olvido, para que las juventudes venideras las conozcan y los de la guardia vieja la revivan, como una forma de redescubrir nuestras raíces y afirmar la identidad de un pueblo.
Lo del hotel Euskalduna “La Fonda” amerita otra nota con su historia, porque este pueblo vecino nacido de distinta raíz, lleva en la sangre de su gente, el mismo ADN que la de los habitantes de Necochea.

El accidente de los Rubiera

Merico rubiera, casado con Catalina Daguerre, era un joven emprendedor, capacitado, y decidido. Llego desde Lobería con enormes ansias de realizar cualquier tarea que redundara en beneficio de este pueblo que comenzaba a cobrar vida y al que auguraba un futuro de grandeza y que lentamente se iba ganando su corazón.
El verano se había adelantado al almanaque y el sol se hacia sentir, por ese motivo el matrimonio desde hora temprana había organizado las compras de navidad y año nuevo en el vecino pueblo de Necochea. Trepo a la coupé ágilmente y abrió la puerta a su joven esposa que cargaba en su regazo a su hijo Raúl, un niño de escasos tres meses de edad. Tomo la calle principal (hoy 519) y desde lejos observo que la balsa estaba amarrada del lado de Quequén, a lo que le comento a Catalina: “nos esta esperando”.
Al llegar a la esquina de “La Fundadora” de los hermanos Gil, giro a la izquierda y tomo la calle que bajaba hacia el playón donde se hallaba la balsa. Pero 50 metros antes de llegar, Ildefonso Altuna, sin advertirlo, hizo girar el malacate que ponía la balsa en movimiento y, cuando esta comenzó a desplazarse, Mericio, sabiendo que no llegaba a subir el auto a la balsa, aplico los frenos. La coupé Ruby se detuvo, pero por lo mojado del playón continuo resbalando hasta caer en el río.
Ante el estupor de los de la balsa y los gritos de Catalina, Raúl rompió en llanto. Era un pequeño berrido que acompaño el desplazamiento del auto hasta que este se detuvo. El agua cubrió las rodillas de Catalina, que se puse de pie con Raúl en los brazos.
Solo hubo que lamentar de este accidente, que Mericio estropeo sus botines abotonados y sus blancas polainas.
Lograr rescatar el auto del río fue un capitulo que gozo el vecindario de “La Fundadora”. Mericio Rubiera integro la primera comisión de la “Unión Vecinal de Fomento”, fue Juez de Paz, Comisario de Corrales de Pueblo “Cuidad de Quequen” y, por dos veces, Delegado Municipal de Lobería.
Su hijo Raúl nació el 4 de septiembre de 1924, según consta en los libros de la iglesia “Nuestra Señora de la Merced”, tiene en la actualidad 82 jóvenes años de edad y vive en el lugar de su nacimiento.


Carlos Alberto Galván.
Presidente de la Fundación Cultural de la UPC
Cuentista y autor sobre los artículos históricos sobre la región.
Para Ecos Diarios


Un fragmento de la entrevista con Raúl Rubiera

Aprovechando el artículo sobre la balsa y ya que se trato el accidente de la familia Rubiera les mostraremos fragmentos de una entrevista que realizamos a un participe de dicha anécdota, el personaje es Raúl Rubiera, que si bien tenia unos meses de vida cuando sucedió el accidente nos cuenta lo acontecido según los lo que le fueron contando allegados a el

¿Cómo era la manera de movilizarse en esa época, de Necochea a Quequén?

“El único puente que existía era el Colgante, no estaba este puente (señala el puente Dardo Rocha), no estaba el de allá de la Estación, porque la gente de Quequén se cruzaba a _Necochea en la balsa, que ahí como te dije cruzaba mi padre, yo no me acuerdo porque era muy chico, solo hablo por lo q me comentaban los más grandes”

Contále a la gente lo que paso con la balsa

"¿Me salvo sabes quien? Altuna, el propietario de la balsa, es el que me salvo”

¿Y que paso?

“Bueno según dicen, que uno de los tensores, parantes o cables de la balsa se corto, entonces al cortarse, se iba hundiendo y vino Altuna con su tractor y ahí engancho y llego a tiempo para levantar la volanta, que mi viejo era volanta, y bueno, otra cosa no me acuerdo por no era un muchacho de quince, veinte años, era un nene de brazos, y eso es todo lo que se"













viernes, 16 de abril de 2010

Entrevista a Oscar Perez


Compartimos aquí dos estractos de la entrevista realizada a Oscar Perez. Vecino quequenense, se desempeño en el Ecos Diarios y en Radio Necochea. También trabajó como comerciante y Martillero Público. Fue concejal por el Partido Vecinalista y sueña con ser intendente de Quequén.

“Yo creo que si no hubiese pasado la inundación del 80´ Quequén hubiese cambiado bastante. Porque Percario en aquel momento cuando negocia con Saint-Jean que era el gobernador de la provincia, había negociado un plan de obras para Quequén muy groso. Como para volver a consolidar que Quequén fuera una ciudad y no un pueblo en el medio de la nada. El supuesto proyecto que había de obras para Quequén, termina repartiéndose para todos y en cualquier lugar por la inundación. Eso hace que se pierda, calculo yo, la oportunidad histórica de consolidar a Quequen como ciudad”

“Nosotros la primera actuación importante que tuvimos fue cuando vinieron Alfonsín y Armendari a inaugurar la planta de ACA y FACA. En mi casa pintamos algunos carteles de la autonomía, que son algunas banderas que ustedes han llevado, fueron pintadas en casa. Nos ponemos en el puerto, creo que fue en el 85´u 86´, y nos aparecemos con las banderas y los palos y la “patota” nuestra, no eramos tantos pero eramos, y empezamos a cantar le a Armendari y Alfonsin, y se pusieron nerviosos mal, y a muchos no les gusto para nada porque era el Presidente de la Nacion el que había venido, como íbamos a hacer eso.”

viernes, 9 de abril de 2010

Guerrico, Quequén y la Fundación del Pueblo de Lobería

Del libro escrito por el Capitán Capellán José M. Suárez García llamado HISTORIA DEL PARTIDO DE LOBERÍA (tomo segundo) impreso el año 1949.



En el capítulo 1 se trata el tema de la fundación del pueblo que asiente las autoridades del Partido de la Lobería Grande.

“los inmensos beneficios que reporta un centro destinado a radicar las actividades civiles, religiosas, comerciales, culturales y sociales, inherentes a una agrupación civilizada, no podían escapar a los principales terratenientes de esta zona y, en 1854, iniciaron las primeras gestiones para obtener su fundación”

“a mediados de 1854, se concretaron las justas aspiraciones del vecindario loberense en nota elevada al Ministerio de Gobierno, que la secretaria resume, con fecha de 3 de agosto en los siguientes términos: “juez de paz de Lobería”. Adjunta un proyecto de la Comisión Municipal que tiene por objeto fundar un pueblo sobre la costa del río Quequén Grande; que este pensamiento se cree de fácil realización por cuanto este partido tiene mucha población; todos trabajarían en ese sentido; y solicitan a este respecto la aprobación del gob.
Agosto 3/1854 Fho.”


Tengamos en cuenta que por esos días los territorios en la boca del Quequén grande donde los habitantes loberenses pretendían establecer la cabecera del partido (hoy se encuentra emplazado el partido de Quequén) pertenecían al Señor Manuel J. Guerrico. Y para adentrarnos en más detalles referentes a la posesión de dichos terrenos veamos lo que el departamento Topográfico en una carta informaba:

“el terreno que esta en posesión D. Manuel J. Guerrico en el Rincón de Quequen le pertenece en propiedad en extensión de once y media leguas cuadradas, por dos títulos que le fueron otorgados por el gobierno en 6 de septiembre de 1836 y el 16 del mismo mes y año. Por el primero el Sor. Guerrico compro al Estado ocho y media leguas cuadradas, y por el segundo le fueron donadas por D. Juan Manuel de Rosas las tres restantes hasta el completo de las once y media que le habían sido medidas anteriormente según consta en registros de esta oficina. Las leguas donadas son parte de las 60 leguas cuadradas que por ley le fueron donadas a D. Juan Manuel de Rosas”
Buenos Aires, junio 17 de 1859. Saturnino Salas. Pedro Pico


Como se podrá notar a simple vista, Guerrico era sin dudas un hombre muy poderoso para la época. José M. Suárez García lo describía de la siguiente forma:

“El sr. Manuel José de Guerrico, poderoso hacendado, prestigioso político, senador y miembro de importantes comisiones de carácter oficial, tenia una influencia avasalladora en las esferas gubernamentales”

Pero de Guerrico hablaremos en otra ocasión en forma más exhaustiva ya que su incidencia en la vida y los destinos de este pueblo son innegables y merece necesariamente un tratamiento exclusivo. En esta oportunidad queremos mostrar como se manifestó este señor Manuel Guerrico al enterarse de la solicitud del pedido de expropiación de sus tierras para entablar la cabecera del partido de las Loberías.

A continuación la nota que envió el Sr. Guerrico al Sr. Ministro de Gobierno Barros Pazos

Excelentísimo señor.

Ya en otra ocasión he manifestado a V.E. que “nada mas patriótico y laudable” que lo que propone la comisión Municipal del Partido de Lobería formando un pueblo cabeza en ese vasto partido de nuestra campaña de que carece hasta el presente. Como vecino y propietario en él aplaudo la idea y ayudaré como pueda a la realización.
La localidad escogida por la comisión Municipal para la formación del Pueblo de la Lobería no ha sido examinada, ni considerados los inconvenientes que ella ofrece “siendo Exmo. Sor, que siendo de mi propiedad el terreno escogido por la comisión, haga creer que por esto lo reputo inadecuado.
Voi a repetir las razones de inconveniencia que he recogido de muchas personas competentes a quien he consultado desde que se me dio vista del expediente.
La boca del Quequén Grande está en la esquina extrema del extenso partido de la Lobería; ninguna población hay inmediata; ningún camino la atraviesa; el terreno es arenisco y de poca vegetación; el agua es salada como que participa del flujo de mar. Ningún vecindario concurrirá a fomentar un pueblo formado bajo tan malos auspicios.
El partido de la Lobería tiene Exmo. Señor, terrenos hermosos en que fundar un pueblo, que se vea desde la fundación rodeado de riqueza, donde pueda ofrecer a los pobladores que acudan a poblar terrenos fértiles con aguas cristalinas, con piedra inmediata para cercas y casas, y ocupando el centro de los recursos que deben servir a su acrecentamiento. Si el puerto de la boca del Quequén se hace hábil para los transportes de los frutos del pueblo y del partido, ocho o diez leguas de distancia no es inconveniente. Un viajero europeo a quien encomendé visitar los campos para formación de una colonia agrícola, me aseguró que el mejor aliciente para los colonos era la fertilidad de la tierra; que además el puerto Quequén era incierto por su barra mudable, como que los medanos que la dominan son deleznables. Esto me retrajo de llevar adelante el pensamiento de una colonia allí. Y efectivamente no son los puertos los que favorecen la riqueza de los pueblo sino su localidad y la fertilidad de la tierra. La Ensenada, Zarate, Baradero y Sn. Pedro, nada crecen con sus hermosos embarcaderos, mientras que Dolores, Chascomus, Lobos, Villa de Mercedes y otros pueblos mediterráneos ricos de prosperidad, aumentan de día en día su población y comercio.
El pueblo que se funde en el partido de la Lobería, está llamado a crecer rápidamente y a reunir en poco tiempo un vecindario numeroso si se coloca bien; si se escoge un terreno que satisfaga las exigencias de los pobladores que van en demanda de tierra fecunda, de agua potable y de recursos inmediatos. I deben hallarse fácilmente estas ventajas si la Comisión fija su atención en ellas. El partido de la Lobería las ofrece en muchos puntos, por ello me permitiré indicar a V.E. que si lo tiene a bien, que la Comisión Municipal llame a su consejo vecinos expertos que estudiando las necesidades de un pueblo y sus conveniencias elija el terreno que crea mejor en la extensión del partido de Lobería.
No creo del caso exponer a V.E. lo que me compete como dueño del terreno designado por la comisión municipal, porque tengo la firme convicción que reconsiderando este asunto por los mismos S. y S. y llamando a consultar a personas inteligentes se fijaran en un lugar adecuado y ventajoso a la comunidad que se va a formar.

Buen Ayre Agosto 7 de 1857
Exmo. Señor
Manuel J. Guerrico


Luego de ver la carta del Sr. Guerrico, el autor del libro hace un comentario sobre la misma que seguidamente exponemos:

Leído este documento se advierte “la buena voluntad” con que el Sr. Guerrico “aplaude la idea” y que “ayudara” a realizar la fundación que considere “el propósito mas patriótico y laudable”. Declara que las tierras reclamadas son inservibles, una razón para que se desprendiera de ellas después de las repetidas solicitaciones del vecindario pero no quiere ceder ni si quiera las dos leguas de tierras peores, según su opinión de las once leguas y media que allí posee. Argumenta acerca de la imposibilidad de establecer allí un pueblo y mas adelante admite, en cambio, la posibilidad de la construcción de un puerto y de su utilidad aunque diste diez leguas del pueblo. En cuyo caso ¿Quién se beneficiaria con esta instalación lejana, el pueblo, o el propietario del campo?
Aduce que los pueblos mediterráneos : Chascomus y Dolores prosperan sin tener puertos marítimos o fluviales, pero no se da o no se quiere dar cuenta de que, esos mismos pueblos, con una campaña incultivable, son importantes centros comerciales, precisamente por que son los “puertos terrestres” de ese inmenso marque es la campaña del sur cuyos habitantes tienen allí su apeadero forzoso para que todo el que es transeúnte; recalada obligada para esos bajeles de la pampa: las carretas, que transportan todos los productos de la tierra y proveen de abastecimientos para la subsistencia humana a toda la dilatada región sureña; posta general de todas las líneas de galeras, medio vital de comunicación para todos los vecindarios; y además centro al que acuden todos los habitantes del sur para los actos administrativos, judiciales, religiosos, sociales, asistencia medica, educación de los hijos, convivencia social en los largos inviernos, y finalmente único “puerto” al que pueden recurrir en las borrascosas tempestades de la pampa, cuando, se agitan los campos, con la despavorida huida de las salvajina primero y de los habitantes después, ante la vorágine del malón. ¿Por que no cita, en cambio, pueblos que, como San Justo, Ranchos o Cañuelas que también eran mediterráneos y no prosperaron porque no eran “puertos” de entada y salida para la inmensa región sureña? Afirma también el señor Guerrico que los pueblos viven y adelantan cuando su campaña es rica y exalta por su parte la riqueza de la campaña del Partido de Lobería; ¡Sin embargo, preconiza la imposible subsistencia del pueblo que se establezca en la boca del Quequén! Desconoce, además, capacidad, inteligencia y conocimiento de la región a la “comisión” osea a los numerosos vecinos que firman las peticiones y claman por la cesión de las tierras aledañas a la boca del Quequén; sin embargo, muchos de ellos son caracterizados miembros de la sociedad y de la capital y no pocos de ellos hacendados limítrofes y perfectos conocedores de los campos del Sr. Guerrico.
Cita además el Sr. Guerrico los pueblos del norte de la Provincia que teniendo puerto no prosperan, sin querer darse cuanta que su problema por estar mas cercanos de Buenos Aires, es totalmente distinto del de Lobería, totalmente asilado en invierno y sometido a los malones del indio.
No carecían sin embargo de objetividad, agudeza y efectismo las argucias empleadas por el Sr. Guerrico que se revela un gran dialéctico para no ceder sus tierras, en aquellos tiempos en que no se conocían los sistemas de fijación de medanos y perforación para extraer agua de las napas mas profundas y cuando no eran previsible la fantástica transformación de aquellos campos, casi desiertos, en este maravilloso granero capaz de abastecer la mayor flota, dar movimiento a un gigantesco puerto y fomentar, pletóricamente, la vida comercial de la mas prospera ciudad.

jueves, 25 de marzo de 2010

Carta del Presidente Asociación para el Reconocimiento de Nuevos Municipios

Queridos amigos:

El pasado 13 de Marzo, en la ciudad de Lezama, cabecera del Nuevo Municipio del mismo nombre, que pasa a ser el numero 135 de esta provincia de Buenos Aires, escasa en municipios, se realizo el festejo de la comunidad toda, recordando su reciente reconocimiento plasmado en ley.
Comenzó con una misa en la Iglesia Cristo Rey oficiada por el sacerdote Juan Carlos Desenzo destecando la gesta, agradeciendo al pueblo su participación en ella.

De allí, nos trasladamos al Club J. M. Cobo donde un importante grupo de artistas engalanaron la velada.
La organización fue compartida por la Comisión Nuevo Municipio y los autoconvocados, a quienes debemos felicitar por la unidad, la vocación y el sacrificio, sin duda elementos necesarios para este final feliz.
Nuestra presencia meses atrás en el Club El Tero donde ambos convergieron, nos dió a los allí presentes la sensación de éxito que luego se concreto.
Al rededor de las 23 hs se anuncio el traslado de autoridades, diputados y senadores como así tambien a las ONG presentes, al Cuartel de Bomberos, donde se agasajó con una cena a diputados y senadores que tan importante papel jugaron en la concreción.
Fue el primer orador el Diputado m.c. Julio Alfonsín quien hizo un detalle desmenuzado de lo ocurrido en el transcurso de los años de una comunidad en pos de un objetivo.
Lo sucedieron, en la palabra, diputados y senadores participes en la votación y quienes rubricaron con su firma las sucesivas presentaciones a traves de los años.
Destacable para nuestra Asociación de Reconocimientos de Nuevos Municipios fueron las palabras del Diputado Pasaglia ( bajo su presidencia en la Cámara de Diputados, participamos de la presentacion del libro "Hacia una nueva provincia") haciendo un reconocimiento público de los mas de 40 movimientos que estan en la búsqueda, instando a sus colegas a estudiar una Ley Marco que aleje las presiones. Arengó por la unidad de la comunidad en la planificación futura para hacer exitoso el nuevo municipio y pidió que tengan puesta la atención sobre la nueva gestión.
La Asociacion fue resaltada en su presencia, cosa que agradecemos reconociendo no solo nuestra existencia sino ubicándolos en la cena homenaje y entregandonos un presente cosa que tambien sucedio en el Club J.M. Cobo ante la comunidad toda, desde cuyas entrañas surgio este nuevos municipio.
Nos retiramos satisfechos ampliamente.
Con el afecto de siempre.

Hugo Iraizoz

Pte. de la Asociación para el Reconocimiento de Nuevos Municipios

La granja Glaxo Marca registrada de la historia

Sería bueno que cada uno de nosotros se tomara el tiempo necesario para escribir historias, cortas historias del pasado de las cuales tenga conocimiento y las guarde para los tiempos, que vayan de generación en generación, historias pequeñas que dibujan grandes bocetos de la realidad.

Historias de una vida que no podemos perder (por el periodista y escritor Oscar Finucci)

Las pequeñas cosas de la gente común

Doña Aurora Felipa Domínguez nos contó que…Habiendo enviudado su madre, un día dejaron la casa de la estancia San Martín donde su padre era capataz. Doña Elena Montenegro se traslado con sus seis hijos a Quequén con la esperanza de poder afincarse con algo de dinero que el patrón le había hecho llegar para comprar una casa en el pueblo, donde Aurora y sus hermanos irían a la escuela.
Por aquellos tiempos, el estilo de vida y las costumbres presentaban pocas oportunidades para una viuda con seis hijos, y la falta de conocimiento llevó a doña Elena a confiar en un administrador de apellido Ruiz, quien en poco tiempo y vaya a saber con que excusas dejo la desafortunada familia sin casa y sin dinero. Sin recordar los pormenores, Aurora nos cuenta que su madre no dudo en instalarse en una habitación alquilada en una casa de familia (frente a la plaza de Quequén), y que allí con sus trabajos de costura intentaba al menos mantener a sus hijos.

La situación empeoro para todos cuando la salud de doña Elena se vio comprometida por la diabetes, y con mucha angustia tuvo que repartir a sus hijos para que no pasaran necesidades, mientras ella mejoraba sus problemas.
Fue así que Aurora tenía seis ó siete años, y un día un carretón con tarros lecheros paró frente a la casa, y recuerda que su madre la subió y se despidió.
Por esos días, el carro lechero era todo un acontecimiento más que importante para el pueblo, no importaba cuanto lloviese, a la misma hora y por el mismo camino, siempre aparecía

A ella le gustó el paseo, pero el recorrido no la devolvió a su casa con su madre. El caro se detuvo en un lugar lejos del pueblo y la arboleda dejaba ver una casa imponente, con corrales llenos de vacas y algunos peones que trabajaban, entonces allí se encontró con un mundo de cosas nuevas: aquella era la Granja Glaxo.

Corría por entonces el año 1926 ó 1927.

En la granja solo contrataban a hombres con experiencia; el trabajo era duro y debían cumplirse las tareas sin condicionamiento alguno. El capataz vivía con su familia, mujer y una pequeña de tres años a quien Aurora debía cuidar ya que su madre estaba abocada a la labor de cocinar para la peonada, la atención de los gallineros y de los terneros chicos, además de tantos otros trabajos que la gente de campo de esa época debía realizar.

Aurora sigue recordando y cuenta que un día llegaron a la granja personas de Buenos Aires, entre ellas, la patrona (así recuerda ella que la llamaban). Y a consideración de la jefa, todos tenían que ser personas instruidas en la granja, y tenían que saber leer y escribir. Por tal motivo, Aurora comenzó a cumplir con sus estudios en la escuela Nº 2 (actual escuela Nº 25). Todas las mañanas se levantaba temprano y subía el carretón lechero que le llevaba leche a todas las escuelas y al resto del pueblo. Durante su recorrido, las paradas eran las mismas.

Así fue que Aurora pudo asistir al establecimiento educacional durante dos años hasta que la familia del encargado debió mudarse a Necochea y, en consecuencia, ella volvió con su madre.

Un día la granja se llenó de gente (tal vez no fueron tantos, pero sus ojos de niña lo vieron así) y llegaron animales nuevos, unas vacas enormes. Algunos hombres no hablaban castellano y a la peonada los llamaban “gringos” estos hombres eran holandeses e ingleses).

Los gringos trabajaban en el galpón, donde funcionaba el laboratorio. Ellos participaban más de la vida la casa, almorzaban en la cocina y cenaban a las seis de la tarde, tal como se acostumbraba en ese momento.

Aurora también recordaba que los perros jamás estuvieron cerca de la casa, ya que la limpieza y el orden eran fundamentales en todo lo que hacía y nada quedaba librado al azar. Cada cual se manejaba en sus funciones como si los patrones estuvieran en el lugar, cuando en la realidad se encontraban en Buenos Aires.

Los muebles de la vivienda eran de mucha categoría y en la mayoría de los casos habían sido traídos de Buenos Aires. El juego de valijas era inglés, con flores azules con un fondo blanco y de forma irregular. En todas las habitaciones de la casa había lámparas “ Primus”, de origen suizo (y aún hoy se conservan algunas piezas de recuerdo).

El vecino Campos “Campitos” cuenta algunas historias más


Allá por el año 1934 su padre y su tío andaban en un camión marca internacional modelo ´30, quien por entonces debió ser el mejor de los camiones. Traían en él la leche de los tambos de la zona hacía la granja. La Glaxo contaba con el privilegio de ser la “única usina láctea” de la región, y el nivel de producción era excelente, ya que sus laboratorios producían leche en polvo que luego se exportaba.

La granja contaba con instalaciones modernísimas para la época, están ubicadas a la vera de la ruta que unía Quequén con Lobería y su entrada, precisamente, estaba frente de lo que antes se conocía como el sector de la “curva de la muerte”. El predio era bastante extenso y del lado sur estaba la casa con detalles de estilo inglés, de dos plantas y altillo, sobria y elegante.
Según datos que se obtuvieron del libro “ colonias y colonizadores”, de la colección La historia Popular, la iniciativa del Departamento de Tierras del Ferrocarril Argentino, aproximadamente en 1870, fue la de otorgar la concesión de predios de tierras por parte del gobierno de la Nación, a cargo de Bartolomé Mitre, a la empresa inglesa que manejaba la Glaxo. Por lo tanto, las franjas de tierra de ambos lados de las vías del ferrocarril tenían como propietarios a os empresarios ingleses.


En el libro “Historia de de Lobería” en el capitulo Crónicas Quequenenses, en un párrafo se manifiesta que “el domingo 15 de noviembre de 1925 la firma Bullrich y Cia. Remató 124 chacras y quintas”. Además, agrega la publicación que la Granja Glaxo fue considerada como una de las industrias con mayor pujanza del pueblo de Quequén.

Tanto fue el movimiento que había en ese momento que la “Compañía Anglo Argentina” se estableció en la zona de influencia e introdujo la energía eléctrica en la ciudad, teniendo como proyecto a futuro la instalación de una usina eléctrica en el año 1929.

Si bien no existe una fecha precisa para otorgarle a la instalación de la Granja Glaxo, propiedad de empresarios ingleses, si se puede afirmar que durante las décadas del ‘20al ’40 conservaron su esplendor productivo y estuvo relacionada con otras empresas fuertes que tenía el país por aquellos años.

Los supervisores de la Glaxo

El encargado de la Glaxo era Mr. Morrow, supervisor de la granja y responsable de que todo marchara bien. Pero tenía algunas características personales, como por ejemplo, manejar su coche a gran velocidad. Dice la historia que los vecinos veían de lejos la polvareda y se daban por enterados: “allá viene el Mr. Decían los operarios del lugar, y hasta algunos se atrevían a decirle que si seguía con su ritmo de manejo tendría un accidente, pero el inglés poco caso les hacía a su gente y continuaba levantando polvaredas por las calles de Quequén. Un día pasó lo que se esperaba, el supervisor inglés volvía del pueblo y perdió el control de del auto, se fue del camino y volcó. Las consecuencias, un brazo fracturado y varios golpes en el resto del cuerpo, nada de gravedad”

Tiempo después el inglés perdió prestigio y lo reemplazaron en le año 1938 por Celestino Bertoli, que había nacido en Udine, en la alta Italia, donde vivió hasta la llegada de los infortunios de la guerra y la familia debió separarse.
El padre de Celestino embarco para América como tantos otros italianos, y su madre luego alcanzó a comprar pasajes para tercera clase para América, pero sin destino fijo, aunque luego lograron los Bertoli reencontrarse en la Argentina y se establecieron en Tandil. Allí fue creciendo Celestino y sus hermanos, mientras estudiaban y trabajaban.


La llegada a la Glaxo

Un día le ofrecieron al joven y guapo italiano un cargo de contador en un tambo inglés al sur de la provincia y éste aceptó. Entonces, Celestino llegó a Quequén donde lo espera en la estación de tren Mr. Mirrow, hasta allí el encargado de la Glaxo, y convivió en la granja hasta el año 1948 siendo su hogar y lugar de trabajo como responsable del mismo.

Celestino en poco tiempo fue el hombre de confianza de los ingleses, además sabía muy bien el idioma y eso facilitó el trato con otros empresarios y supervisores que venían de visita. Fue así que logró ser el encargado de la planta favorecido además por los problemas que Mr. Mirrow comenzó a tener con los patrones.

El italiano comenzó a viajar con frecuencia a Buenos Aires para llevar las muestras de la leche en polvo a los laboratorios de la empresa, donde se contaba con mas tecnología. La Glaxo tenía en sus planes exportar este producto que se elaboraba en Quequén y tenía que ser de primera calidad, por eso se exigían tantos controles.

Mayor producción desde Quequén

Más adelante se instalaron los laboratorios en Quequén y se comenzó a producir con mayor cantidad la leche en polvo para ser derivada a Buenos Aires, corría el año 1940 y la industrialización iba en constante crecimiento debido a la demanda del producto, a nivel nacional y desde el exterior.

A pesar de ese furor que tenía la leche en el mercado, apareció un gran problema por aquel entonces: los ambos de la zona de influencia no alcanzaron para proveer a la Granja Glaxo de la cantidad de leche que necesitaba para poder satisfacer la demanda de leche en polvo y, al mismo tiempo, abastecer al pueblo.
Según cuenta la historia, Celestino Bertoli, el encargado manifestaba que “era una situación caprichosa, ya que los tamberos nunca se ponían de acuerdo con los empresarios ingleses en cuanto a los números y el problema se agravaba cada vez más”.

La Glaxo, a Chivilcoy

La relación llegó a ser insostenible en un momento y la empresa decidió que la Granja Glaxo se traslade en su producción a Chivilcoy, hecho que sucedió en 1948.

Al italiano Celestino le ofrecieron continuar con su trabajo en Chivilcoy, pero por esos tiempos ya había conocido a Elena Domínguez, el corazón le impidió alejarse de Quequén. Entonces, con sus ahorros compró un campo de la zona y construyó una casa para vivir junto a Elena donde permanecieron hasta la vejez.

Quedo en el olvido el predio de la Glaxo, el tambo, la gran casa y el resto de las instalaciones. Los ingleses nunca más volvieron a Quequén, ni tampoco otras usinas lácteas que se asentaron en la región lograron igualar a la Glaxo.

El remate final

Pasaron algunos años y en 1960 se remataron las pocas cosas que quedaban en el lugar. A ese triste encuentro concurrieron algunos personajes del momento, como el propio Celestino Bertoli, el ex encargado quien adquirió algunos muebles del estilo inglés que luego doña Elena con muy buen gusto acomodó en su casa.

Así fue trascurriendo el final de la hermosísima y productiva Granja Glaxo, marca registrada en la rica historia industrial de Quequén.

Nota de la redacción: agradecemos el aporte de la señora Sandra Gallo, quien nos acercó el contenido de este material.

MATERIAL EXTRAIDO DEL PERIODICO “VOCES DE QUEQUÉN”AÑO 3 Nº 28 OCTUBRE-NOVIEMBRE 2007 Y AÑO 3 Nº 29 NOVIEMBRE –DICIEMBRE DE 2007

martes, 16 de marzo de 2010

Proyecto para la recuperacion del cinturon verde quequenense















El viernes 5 de Marzo, Susana Rigaud, Lic. En Administración y Referente Regional del Instituto Provincial de Acción Cooperativa (IPAC)
[1] dependiente del Ministerio de la Producción, y la Dra. Nélida Lopez, Abogada, Secretaria del Consejo de Administración de la Federación de Cooperativas de Trabajo (FECOOTRA)[2] brindaron una charla con el objetivo de comenzar a formar una cooperativa de horticultores en nuestro Quequén. Esta iniciativa proviene de la inquietud de un gran amigo, Crisanto Picon, quien plantea recuperar el cinturón verde, ámbito geográfico de la perisferia quequenense, donde proliferaban las quintas y familias que trabajaban la tierra, produciendo alimento sano y natural, tanto para ellos como para toda la comunidad.

Hoy, los trabajadores son las primeras víctimas de recortes presupuestarios, despidos, suspensiones, reducción de salarios y cierre de fábricas.Frente a esta situación, en su permanente lucha por no perder los derechos conquistados, los trabajadores deben agudizar la toma de conciencia de los problemas sociales, determinados a desentrañar los hechos y conociendo sus debilidades y fortalezas. El cooperativismo de trabajo es una alternativa válida para la autodeterminación y autogestión, un nuevo rumbo para los que no quieren resignarse a perderlo todo y deciden luchar por la existencia de sus fuentes de trabajo, que recuperan empresas y que se recuperan a si mismos, para formar nuevas alternativas de trabajo colectivo.
FECOOTRA fomenta el desarrollo económico centrado en las personas. La singularidad de estas empresas (cooperativas de trabajo) consiste en su contribución al crecimiento social y económico, a la creación y permanencia de la ocupación laboral, a la lucha contra la marginación, a la cohesión social y a la integración democrática de los ciudadanos, coadyuvando al Estado a sostener y fomentar la cultura del trabajo y la creación de estructuras de apoyo al empresariado social.

Los principales temas de la charla fueron:
  • El cooperativismo como herramienta para luchar contra la desocupación.
  • El cooperativismo como respuesta a este mundo individualista y excluyente.
  • Estrategias para comercializar la producción de la cooperativa.
  • Cultivos orgánicos.Recuperación de la cultura del trabajo.

La charla fue verdaderamente muy gratificante y enriquecedora. Consideramos muy importante ser partícipes de estas iniciativas, las cuales buscan recuperar fuentes de trabajo, muy necesarias e indispensables en nuestros días. De esta forma, intentamos recuperar las cosas que han hecho grande a Quequén y que lo llevaron a ser reconocido como “el pueblo del trabajo”.

[1]La Dirección Provincial de Acción Cooperativa es la repartición del Ministerio de Producción que atiende la promoción y fiscalización en materia cooperativa en la Provincia de Buenos Aires. La misma participa en el diseño e instrumentación de políticas vinculadas al sector cooperativo y a las diversas formas asociativas y de cooperación empresaria de interés común. Para su implementación, desarrolla acciones de asesoramiento, promoción, educación, capacitación cooperativa, fiscalización preventiva, mediación empresarial, formulación y evaluación de proyectos, y financiamiento de los mismos. Pagina Web: www.mp.gba.gov.ar/spmm/cooperativas/index.php

[2] La Federación de Cooperativas de Trabajo (FECOOTRA) constituida el 29 de mayo de 1988, apareció en el escenario social en momentos en que la declinación general de la economía se hacía sentir, lo mismo que el desempleo en aumento y la decreciente producción, la presión progresiva de la deuda pública y privada, la inflación galopante, las caprichosas tasas de interés. Pagina Web:
www.fecootra.org.ar

lunes, 15 de marzo de 2010

Un freno a los agroquímicos

La Justicia de Santa Fe dejó firme la prohibición de utilizar glifosato, el pilar fundamental de la producción sojera, en cercanías de zonas urbanas. El fallo marca jurisprudencia, invierte el cargo de la prueba y exige nuevos estudios a la provincia.

Por Darío Aranda

La Justicia de Santa Fe dictó un fallo inédito, con posibles impactos en el modelo agropecuario de la Argentina, al dejar firme una sentencia que prohíbe las fumigaciones con glifosato en cercanías de zonas urbanas de la ciudad de San Jorge, en el oeste provincial. La medida fue decidida por la Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial (Sala II) de Santa Fe, que dio otro paso inédito: ordenó que el gobierno de Santa Fe y la Universidad Nacional del Litoral (UNL) demuestren, en el lapso de seis meses, que los agroquímicos no son perjudiciales para la salud. De esta manera, por primera vez, se invirtió la carga de la prueba: era una regla que los vecinos y campesinos intoxicados tenían que demostrar las afecciones en la salud, pero ahora serán los impulsores del modelo de agronegocios quienes tendrán que demostrar la inocuidad de los químicos. Los jueces también marcaron jurisprudencia al invocar el principio precautorio: ante la posibilidad de perjuicio ambiental irremediable, es necesario tomar medidas protectoras. Los iniciadores de la causa, vecinos que sufrieron trastornos en la salud por las fumigaciones, ya solicitaron que la medida se extienda a toda la provincia. El glifosato es pilar fundamental del monocultivo de soja.

San Jorge es una ciudad de 25 mil habitantes, ubicada a 144 kilómetros de la capital provincial. Es una zona sojera por excelencia. Durante los últimos quince años creció al abrigo del monocultivo, la zona urbana se extendió y también los campos sembrados. El barrio Urquiza está en el margen del pueblo, es humilde, con viviendas aún sin terminar y fue durante una década lindero a campos de soja. Desde la casa de Viviana Peralta se ve el campo, y también los aviones fumigadores. Ella fue una de las impulsoras de la denuncia inicial, luego de que su hija Ailén, de sólo dos años, sufriera ahogos, intoxicación y un desmayo después de una fumigación.

En marzo de 2009, el juez Tristán Martínez –del Juzgado Civil, Comercial y Laboral Nº 11– hizo lugar a un amparo y ordenó la suspensión inmediata de las fumigaciones en adyacencias de la zona urbana de la ciudad, hasta que el Concejo Deliberante y el municipio se hicieran eco de la ley 11.273 (sancionada en 1995) y determinaran qué zonas pueden ser rociadas con agroquímicos.

Los productores, la Municipalidad y el gobierno provincial, mediante el Ministerio de Producción, apelaron la medida. Los tres jueces de la Cámara en lo Civil y Comercial de Santa Fe (Armando Drago, Enrique Müller y María Cristina de Césaris de Dos Santos Freire) confirmaron el fallo de primera instancia: prohibición total de fumigar con agroquímicos a menos de 800 metros de viviendas familiares (si el método utilizado es terrestre) y a 1500 metros (si la aspersión es mediante avionetas).

El inédito fallo, unánime, fue dictado en diciembre pasado, pero recién se conoció ahora. “Lo llamado a decidir (la prohibición) se desarrolla en un contexto difícil en donde juegan controversias científicas, intereses económicos, presiones y contrapresiones de orden político y empresario, riesgos reconocidos socialmente (...) que tienen la propiedad de transformar lo apolítico en político, desinformación interesada, descoordinación en la gestión pública, insolidaridad con los posibles afectados”, advierte la Justicia.

En las centenares de denuncias por contaminación e intoxicación, los afectados chocan en la Justicia con un pedido de difícil cumplimiento: son los mismos perjudicados (indígenas, campesinos y humildes habitantes periurbanos) quienes deben probar científicamente que los agroquímicos son perjudiciales.

La apelación del gobierno de Santa Fe se dirigió a ese punto débil. La provincia argumentó que la denuncia original (la acción de amparo) era inadecuada porque, antes de cualquier prohibición, se debía dar un debate amplio con demostraciones científicas que certifiquen los perjuicios sobre la salud y el ambiente. Pero la Justicia rechazó ese camino. “Me permito señalar enfáticamente que la cuestión no requiere de mayor amplitud en cuanto a ‘debate y prueba’. Se discute sobre actos que atentan contra el medio ambiente, repercutiendo de manera directa en la salud de los vecinos de la ciudad de San Jorge, lo que importa que existe un factor de urgencia que (debe) ser atendido”, sentenció la Cámara de Apelaciones.

Y, por primera vez en casos de agroquímicos, invirtió la carga de la prueba. No solicitó a las familias afectadas que probaran los males de los agroquímicos. Ordenó que el gobierno provincial, mediante el Ministerio de Producción, realice estudios junto a la Universidad Nacional del Litoral (UNL). En el término de seis meses deberá probar que los agroquímicos no afectan la salud y el ambiente. El juez de primera instancia Tristán Martínez recibió nuevamente la causa recién la semana pasada. Lo antes posible debe notificar a la provincia y la UNL. Cuando se cumpla el plazo de seis meses, el juez Martínez deberá decidir –estudio en mano– si revierte la medida, la mantiene o la profundiza.

El otro aspecto inédito del fallo es el uso del principio precautorio en lo que respecta a agroquímicos. La Ley Nacional del Ambiente define al principio precautorio en su artículo cuatro: “Cuando haya peligro de daño grave o irreversible, la ausencia de información o certeza científicas no deberá utilizarse como razón para postergar la adopción de medidas eficaces, en función de los costos, para impedir la degradación del medio ambiente”. La Cámara de Apelaciones de Santa Fe lo utiliza como una de las bases de su fallo, enumera siete casos en los que fue implementado, destaca que se justifica su utilización cuando haya “falta de certidumbre científica y amenazada de daño al ambiente o la salud humana”, y toma como antecedente lo actuado por la Corte Suprema de Justicia de la Nación, máximo tribunal del país, en el freno a los desmontes en Salta (diciembre de 2008).

La Justicia de Santa Fe afirmó que la limitación en el uso del glifosato para la ciudad de San Jorge se fundamenta en “la incertidumbre científica acerca de los riesgos ambientales, la incidencia de la alteración seria del medio ambiente y la irreversibilidad que pueden provocar tales daños”, y explica que su medida se entiende en razón de “evitar un daño futuro, pero relativamente cierto y mensurable”. El fallo también se mete de lleno en la práctica común judicial: llama a fiscales y jueces que “repiensen que los avances tecnológicos no son poderes que se legitiman a sí mismos”.

En la sentencia, los tres jueces advierten que intervienen intereses sectoriales que no buscan identificar los riesgos reales sino defender sus propios roles en la cadena de agronegocios. Señala que los fumigadores sostienen que las contaminaciones se deben al mal uso (un argumento recurrente de las cámaras empresarias), advierte que las compañías productoras de agroquímicos “sostienen la atoxicidad con estudios encargadas por ellas mismas”, el Estado “pregona su preocupación por el medio ambiente, pero olvida que la mejor manera de comprometerse en el tema es efectuando los debidos controles” y evidencia la falta de solidaridad de los chacareros: “Sostienen que si los productos que aplican se encuentran autorizados, nadie puede endilgar acción antijurídica alguna, por lo que no puede impedírseles trabajar y producir”.

“Lo que se muestra claro es que las posiciones divergentes antes de disiparnos las dudas de utilización de los agroquímicos, sobre todo en zonas urbanas, las acrecientan porque todos conocen los potenciales riesgos de su utilización (...), la preeminencia no la tienen los intereses sectoriales de nadie sino que, por el contrario, la preeminencia está del lado de la salud pública y del medio ambiente”, sentenció la Justicia de Santa Fe y afirmó: “Frente a la existencia de la duda relevante, la aplicación del principio precautorio deviene ineludible, porque la sola existencia de los niños afectados (...) así lo determinan”.

El Centro de Protección a la Naturaleza (Cepronat), organización impulsora de la denuncia inicial, ya anunció que solicitará que la limitación del uso de glifosato se amplíe a toda la provincia. “La Justicia protegió a los habitantes de San Jorge hasta que se demuestre la supuesta inocuidad. Pedimos que se proteja al resto de los santafesinos. Si eso no sucede, habrá ciudadanos de primera, protegidos del uso de agroquímicos, y el resto de la provincia estará expuesto a químicos que están sospechados de afectar la salud y el ambiente.”

El Cepronat, que integra la campaña nacional “Paren de fumigar” –donde confluyen decenas de organizaciones sociales y pueblos fumigados–, instó a que el gobernador Hermes Binner escuchara el fallo judicial y extendiera la limitación para las fumigaciones. “Ante todo, el gobernador es médico, entiende que la salud debe anteceder a las actividades productivas”, afirmó Carlos Manessi, del Cepronat.

Este diario intentó dialogar con el gobernador, pero su vocero explicó que no hablará del tema y derivó las preguntas al Ministerio de Producción. Desde la cartera informaron que los funcionarios no harán declaraciones públicas hasta tanto no sean notificados por la Justicia.

Binner se graduó en Medicina en 1970, en la Universidad de Rosario. Entre otras especializaciones, según su curriculum vitae, focalizó su profesión en “salud pública”, que es un concepto social y político que (según la misma definición médica) está destinado a “mejorar la salud y mejorar la calidad de vida de las poblaciones mediante la promoción de salud, la prevención de enfermedades y la armonía con el ambiente”.

Fuente: www.pagina12.com.ar
15/03/2010

sábado, 13 de marzo de 2010

Autonomistas acordaron comenzar a tomar medidas concretas en su recamo

Los vecinos Autonomistas de Quequén realzaron un debate, en la sede de la Unión Vecinal y acordaron tomar medidas concretas para obtener el reconocimiento como municipio. Allí, manifestaron su disposición para tomar medidas ante la actual “decadencia y abandono” que presenta la cuidad y manifestarse para convertir en ley la creación de un nuevo municipio. Los vecinos también determinaron unirse para lograr los objetivos trazados, participando de las diferentes repunciones que se han planificado a fin de organizar estas actividades. El próximo encuentro quedó pautado para el 8 de abril.

Fuente. www.lapalabra.info
13/03/2010

jueves, 11 de marzo de 2010

Los distritos que están más cerca de lograr autonomía

La creación del distrito 135 avivó las esperanzas, hasta el año pasado casi perdidas, de decenas de localidades que luchan desde hace años por su autonomía. En la Provincia hay al menos 60 municipios que reclaman su independencia política. En pos de esta pelea, esta se creó el Foro Autonomista Permanente en Quequén durante una reunión que se realizó en la Unión Vecinal de Fomento de Quequén. "Es sumamente importante el compromiso que asuman todos los vecinos que entienden a la autonomía como forma de administrar y optimizar los recursos disponibles, en bien de quienes habitan esta injustamente relegada Quequén", señalan los autonomistas quequenenses.

Actualmente en la Legislatura hay dos proyectos de ley para regular la creación de las nuevas comunas y atender al reclamo de esas ciudades que pretenden separarse de su actual cabecera de partido. A pesar de que la movida es resistida por el gobierno de Daniel Scioli, algunos legisladores avanzan en la sanción de una ley marco que establezca los requisitos para los nuevos municipios. Uno de los proyectos pertenece al ex diputado Julio Alfonsín (UCR) y ya cuenta con la aprobación de la Cámara baja provincial, mientras que el otro es del senador Federico Scarabino (FpV).

El proyecto más reciente corresponde a la diputada Alicia Tabarés (FpV), que propone dar un marco legal a los intentos de autonomía en la Provincia. La legisladora presentó la propuesta apoyada en el abanico de solicitudes tendientes a crear nuevos distritos y frente a la inexistencia de normas constitucionales y legales que regulen su tratamiento. Desde el comienzo de su gestión el gobernador Daniel Scioli viene prometiendo una ley marco que regule los pedidos de autonomía en el territorio bonaerense. Sin embargo, promediando su mandato, esta ley nunca comenzó a tratarse, a pe-sar de que dos iniciativas fueron presentadas por legisladores del Frente para la Victoria.

Hugo Iraizoz, presidente de la Asociación Provincial por el Reconocimiento de Nuevos Municipios, indica en diálogo con La Tecla que hay más de 60 localidades que reclaman su independencia, nucleadas en aproximadamente 30 movimientos autonomistas. Con respecto a las expectativas para este año, sostiene: “Tenemos muy buenas expectativas para este año legislativo. La época de la Alianza fue cuando se podía haber avanzado en la división de municipios; después de Duhalde, que fue durante su gestión en la que realmente se separó a los distritos, no se pudo. Después siempre estuvo el justicialismo, y no se avanzó. Ahora, con el cambio de composición de la Cámara, es viento es alentador”.

La asociación que preside Iraizoz divide a la Provincia en cuatro regiones, que a su vez nuclean a cerca de 33 movimientos autonomistas. La región Mar y Sierra, dirigida por Eduardo Chavanne, tiene como casos más resonantes a Santa Teresita (Partido de La Costa), Mar de Ajó (Partido de La Costa), Santa Clara del Mar (Mar Chiquita), Sierra de los Padres (General Pueyrredón), Batán (General Pueyrredón) y Quequén Neco-chea. La región Emancipación (noroeste del Conurbano), presidida por Adolfo Mar-fil de Lima, tiene como pedidos de autono-mía más importantes a: Presidente Derqui (Pilar), Libertad (Merlo), Mariano Acosta (Merlo) y Paso del Rey (Moreno). En la región Centro Sur, comandada por Jorge Rubén, se destacan: Huanguelén (Coronel Suárez), Guaminí, Darregueira (Puán), 30 de Agosto (Tren-que Lauquen), Urdampi-lleta (Bolívar) y Juan Bautista Alberdi. Por último, en la región Sur, que dirige Rolan-do Mansilla, los pedidos de autonomías más importantes son: Gerli (Avellaneda y Lanús), De la Rivera (Lomas de Zamora y Lanús), Cuartel IX (Lomas de Zomora), Banfield (Lomas de Zomora), La Franja (Lomas de Zamora y Almirante Brown), Altos del Tránsito (Almirante Brown) y Hudson (Berazategui).

Fuente: www.latecla.info y Viento del Sur
11/03/10